De origen estadounidense en “Somewhere… Nowhere”, la artista muestra paisajes con casas e interiores en los que refleja, tanto a nivel temático como estético, la coherente evolución de su trabajo. Como sostiene Natalia Alonso Arduengo en el texto crítico de la muestra, “en esta exposición Mónica Dixon enfrenta al espectador como sujeto habitacional a una doble realidad: la casa onírica frente a la arquitectura abstracta, el hogar de ensueño versus un escenario caracterizado por la neutralidad espacial. El primero representado en su aspecto exterior y el segundo de manera interior. El dentro y el fuera deberían tener una continuidad, una complementariedad, pero lo cierto es que estas obras se singularizan precisamente por eso, por la tensión y la dicotomía existente entre ambas partes aun cuando la ausencia del morador sea nexo común en los dos enfoques.”